
Mis primaveras últimamente
se han vuelto inciertas.
En vez de rosas tienen un aroma
a lo que el tiempo dejó sin remedio
atrás.
Es que será que la vida en su
marchar provoca cambios que a
pesar de nuestra impotencia son
imposibles de frenar.
Nuevos brotes de esa manera
llegarán, qué quién sabe que
color y resultados nos traerán,
,,,pero ya que importa si al final..,
estas últimas primaveras dejaron
atrás cosas que son imposibles
de recuperar y que me resultan
por mas que lo intento difíciles
de soltar.
Aunque no sé todavía lo que está
por llegar…
Morina.